Un hombre dejó al morir diecisiete camellos camelos a sus hijos.
En su testamento, pedía explícitamente que su propiedad debía dividirse de la siguiente manera:
La mitad [1/2] de los camellos eran para su hijo mayor, un tercio [1/3] a su segundo hijo y una novena parte [1/9] de los camellos a su hijo pequeño.
Los hijos están confusos dilema preguntándose cómo dividir 17 camellos de esa manera: la mitad para uno, un tercio para otro y una novena parte para el hijo menor.
¿Puedes ayudarles?
Comentarios
En caso que todos los camellos fuesen idénticos en valor, que los hijos compren un camello más aportando dinero con la misma proporción con la que recibirán los camellos. Y así ya podrían dividirse los camellos.