Cuando éramos niños, teníamos curiosidad por todo. Experimentábamos con las cosas, cuestionábamos todo a nuestro alrededor, tratábamos de entender cómo y por qué funcionaban las cosas. Esa actitud natural contrastaba con lo que pregonaban a nuestro alrededor. Era el síndrome de "Eso no se hace , eso no se dice , eso no se toca ." Una de las cosas que más me sorprendió en mi primer viaje a Estados Unidos fue que, al visitar los museos de muchas ciudades, leías en todos los rincones carteles que exclamaban " Please, touch ". Se trataba de una incitación a que tanto niños como adultos curiosease y experimentase con los objetos que allí se encontraban. Está en nuestra naturaleza como seres humanos , el sentido de la curiosidad por el mundo que nos rodea . Al fin y al cabo, eso es lo que nos permite crecer y prosperar . Para ser creativo s, tenemos que preguntarnos por qué las cosas son como son , y abrazar la idea ...