Muy a menudo me sorprendo de que las personas y los equipos aludan a la falta de recursos para justificar su falta de creatividad . . Para mí, es más bien todo lo contrario (casi). Incrementos importantes de recursos no sólo no conllevan aumentos proporcionales en creatividad sino que, muchas veces, de hecho, producen el efecto opuesto . Es algo similar lo que muchos aluden que sucede con la felicidad , no necesariamente cuanto más tiene una persona es cuando más feliz es. . De hecho, cuanto más acomodados estemos y más recursos tengamos, menos razones solemos encontrar para buscar un cambio y, por tanto, menos creatividad vamos a poner en juego.
Personas. Productos. Procesos. Ambiente.