¿Te resulta familiar el nombre de Jimmy Wales? Sus primeras palabras en la web ("Hola mundo!") no parecían destinadas a provocar lo que finalmente ha provocado: una revolución que ha cambiado la manera de crear, acceder y distribuir el conocimiento. Wikipedia.
Por primera vez en la historia existía una enciclopedia que no tenía volúmenes, ni se pagaba a crédito, era absolutamente gratis y también se podía escribir en ella. Es decir, no sólo nos decía cómo era el mundo sino que también podíamos explicarlo nosotros.
Hace 16 años existía otro paradigma y todo el mundo se preguntaba entonces si un invento así podría funcionar. ¿Una enciclopedia escrita por la misma gente que la lee? El asunto tenía miga. ¿Qué sucedería con la rigurosidad se preguntaban muchos?
Se contaba con alguna experiencia en algunas (pocas aplicaciones de código abierto tipo Firefox) en las que eran desarrolladas de manera desinteresada por una comunidad de programadores y después las podían utilizar todo el mundo de manera gratuita. Por supuesto, tenían errores, pero cuanto mayor era el número de usuarios más pronto salían a la luz esos errores y más pronto los arreglaba la comunidad de programadores.
Jimmy pensó que este modelo de creación y de gestión de programación libre era exportable a la creación y gestión del conocimiento para hacerlo también libre. Cuanto más interesase un tema más lectores tendría, antes aparecerían los errores y también antes los corregirían los propios lectores.
Los más de 126 millones de artículos en 295 idiomas diferentes y los 16 mil millones de páginas vistas al mes le han dado la razón. Wikipedia, una idea genial.
Comentarios