No conozco ninguna persona, equipo o empresa que en los últimos tiempos no se haya replanteado seriamente qué están haciendo y cómo lo están haciendo. La consabida crisis y las nuevas realidades competitivas nos conducen a todos por un camino, cuanto menos, incierto.
En estas condiciones son más necesarias que nunca las visiones audaces, inspiradoras y vanguardistas. La creatividad pueda ayudarnos sobremanera a pensar ese nuevo escenario y la innovación a hacerla realidad (para poder concretar esta paso - por cierto - tal vez sea preciso adquirir nuevas capacidades).
Pero conviene tener los pies en el suelo: la innovación no es un remedio sencillo, ni rápido, ni mucho menos previsible en cuanto a resultados. Los periodos de maduración de las ideas innovadoras suelen ser dilatados.
Pero conviene tener los pies en el suelo: la innovación no es un remedio sencillo, ni rápido, ni mucho menos previsible en cuanto a resultados. Los periodos de maduración de las ideas innovadoras suelen ser dilatados.
Comentarios