Probablemente una de las enseñanzas más determinantes del coronavirus es la necesidad de abrir la mente. Algo que ya sabíamos, pero que ahora se ha hecho insoslayable.
Un experto en innovación relataba hace poco una anécdota muy ilustrativa: una empresa se dedica a ofrecer certificados de seguridad, lo llevan haciendo desde hace más de cien años, y siempre lo han hecho en persona. Al llegar la pandemia, la empresa decidió que iba a llevar todo su negocio a través de Internet. Y así lo hizo.
Hay historias muy parecidas sobre el éxito del teletrabajo por todo el mundo, pero una persona de esa compañía comentó a nuestro experto que, sin la pandemia, nunca se hubieran atrevido a cambiar tanto en tan poco tiempo.
Y eso lo han hecho en tan solo unas semanas. Aunque para ello han tenido que esperar unos cuantos años...
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