La necesidad crea virtud, señala el proverbio. Aunque la creatividad y la innovación pueden darse en cualquier momento y en cualquier entorno es más factible que aparezca cuando la tensión que genera la lucha por la supervivencia aumenta.
Este es el caso, del Lu Touch, un invento que minimiza los riesgos de contagio por el virus Covid-19 al tocar determinadas superficies.
Su diseño ergonómico facilita su manejo con solo tres dedos y puede ser transportado colgado del cuello o de la cintura.
La zona de agarre está totalmente separada de la de contacto, por eso es posible abrir y cerrar puertas y ventanas, pulsar botones de ascensor, interruptores e incluso operar en cajeros automáticos, entre otras superficies "compartidas", sin emplear en absoluto los dedos, con lo que se reducen notablemente las posibilidades de contagio.
El dispositivo se desinfecta con facilidad, mediante el empleo de soluciones de alcohol 70º o con lejía o jabón.
El invento en cuestión tiene otras particularidades:
* se ha industrializado un proceso (inyección de plástico) que nació inicialmente a través de impresión 3D
* el invento, totalmente español (gallego, para más señas), se lleva desde el prototipo a la práctica gracias a la colaboración de diversas empresas (una de las cuales, por ejemplo, se dedica a la fabricación de equipos y sistemas para la industria del automóvil)
El dispositivo se desinfecta con facilidad, mediante el empleo de soluciones de alcohol 70º o con lejía o jabón.
El invento en cuestión tiene otras particularidades:
* se ha industrializado un proceso (inyección de plástico) que nació inicialmente a través de impresión 3D
* el invento, totalmente español (gallego, para más señas), se lleva desde el prototipo a la práctica gracias a la colaboración de diversas empresas (una de las cuales, por ejemplo, se dedica a la fabricación de equipos y sistemas para la industria del automóvil)
* todas las unidades fabricadas hasta ahora han sido repartidas de forma gratuita entre colectivos especialmente expuestos al coronavirus, principalmente trabajadores sanitarios.
Para crear e innovar no hace falta complicarse. Muchos de los grandes inventos parecen sencillos, una vez que uno repara en ellos.
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