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Lograr el consenso... y el compromiso

Es indudable que, a la hora de pensar en nuevas ideas, resulta difícil lograr la plena participación de todos y la máxima productividad.

Por otra parte, cuando ya se tiene la idea y hay que tomar decisiones, establecer un orden de prioridades y lograr el consenso de todos puede consumir mucho tiempo y resultar tedioso.

Se han inventado muchas técnicas y sistemas para mejorar estos aspectos pero todas ellas presentan inconvenientes tales como procesos farragosos y, sobre todo, la falta de confidencialidad. Además, se emplea mucho tiempo en ellos y los resultados finales que se obtienen en esas reuniones pueden ser frustrantes e incompletos en términos de decisiones y también del compromiso necesario para llevar las decisones a cabo.
El Innovator, sin embargo, es un fenomenal sistema de apoyo para esta toma de decisiones en grupo que utiliza un software especial para votaciones en grupo, mandos a distancias individuales para los participantes y un sistema propio para la facilitación del proceso. Todo ello proporciona una retroinformación inmediata y anónima que involucra a todas las personas de la reunión.

El Innovator, por tanto, proporciona a un grupo la capacidad de generar y priorizar temas rápidamente, comprobar su nivel de consenso y acordar anónimamente acciones que se deben llevar a cabo par lograr el éxito.

El diseño de cada sesión de Innovator depende del objetivo que se desea alcanzar. Las mejores sesiones de Innovator son aquellas que se estructuran alrededor de un determinado aspecto del rendimiento empresarial. El proceso lógico que normalmente se sigue es hacer primero una evaluación del pasado, luego moverse al presente, después definir cómo será el éxito futuro y finalmente especificar los factores críticos de éxito necesarios para dirigirse hacia ese estado deseado. 

Sentados alrededor de mesas con configuración en forma de U, cada participante tiene un pequeño mando a distancia para votar conectado a un ordenador central. Los resultados calculados por el ordenador se van proyectando en una gran pantalla. Pulsando un número en el mando a distancia, el participante puede emitir su voto anónimo en relación a la prioridad o a la importancia relativa de un determinado factor crítico respecto a los demás factores. El voto de cada participante se incorpora instantáneamente y el gráfico de los resultados del grupo se muestra inmediatamente al finalizar la votación para su análisis y discusión.

El Innovator elimina la principal desviación que se suele producir en la mayoría de reuniones: la votación anónima impide que la presión de la superioridad o de los mandos influencie el voto del resto de los participantes. Además, el proceso de votación asegura la involucración de todos los miembros del grupo. Esto, a su vez, lleva un mayor compromiso y a un sentido de propiedad con el plan final que aparte del grupo

Y todavía una cosa más importante: el proceso es divertido y la gente ve recompensados sus esfuerzos con resultados inmediatos.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Lo sé por experiencia, esto tiene mucha más miga de lo que pudiera parecer a primera vista. La confidencialidad en las votaciones de grupo es el factor clave. Y si la votación es democrática, sin presiones, el resultado, la toma de decisiones será REAL, no estimativa ni 'parcelada' por intereses o inducciones tácitas. Muy buena entrada, Manuel. RZ
Manuel Ferrández ha dicho que…
¡Muchas gracias, RZ!

Sólo hay una cosa peor que tener una idea y no exponerla. Es decirla y "adornarla" para quedar bien con otras personas. Algunas personas dicen que a menudo esto es por un deseo de agradar a los demás o de no disgustarles. Yo creo que, simplemente, es una cuestión de miedo.

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