Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de enero, 2008

Cultivar aficiones

Cuando uno se dedica a una actividad que le encanta , se pierde la sensación del paso del tiempo y se entra en un estado de fluidez . En dicho estado, la mente se recarga y también, desde luego, la energía . Al estar muy metido en esa actividad (la pasión juega un papel relevante) uno mismo se autoimpone un alto nivel de concentración. Sin duda, es muy aconsejable sacar tiempo para dedicarlo a nuestras aficiones preferidas. Éstas estimulan aquellas partes del cerebro asociadas con el pensamiento creativo y positivo . Paralelamente, la autoestima aumenta y también la seguridad en uno mismo.  Cada vez que nos damos un respiro en la rutina , desarrollamos nuevos modos de pensar. Las aficiones mejoran la creatividad, ayudan a pensar con mayor claridad y agudizan la concentración.

Mente de principiante

O nyuanshin . Así se denomina en la filosofía de instrucción oriental a un estado de ser que consiste en estar perfectamente dispuesto a dar un paso atrás en los conocimientos previos y en los preconceptos adquiridos pues éstos necesitan disiparse antes de iniciar el aprendizaje, de poder comenzar de nuevo y desarrollar nuevas opciones . Esta actitud permite tanto la duda como la posibilidad y posee la capacidad de contemplar cada cosa y cada momento como nuevo y, al mismo, tiempo conveniente. Sin duda, para crear opciones innovadoras , lo mejor es pensar como un budista, como un principiante. Al fin y al cabo, “ para la mente del principiante existen innumerables posibilidades, pero para la del experto sólo unas pocas ”.

Crear por crear

La mayoría de las personas acepta que las recompensas promueven un mejor desempeño . Sin embargo, distintas investigaciones sugieren que esta ley no es tan rigurosa como se piensa. Las recompensas pueden bajar los niveles de desempeño, especialmente cuando el desempeño implica creatividad . Gran parte de la investigación sobre creatividad y motivación ha sido realizada por Theresa Amabile , de la Universidad de Brandeis. En un experimento realizado con estudiantes de educación básica y de universidad hizo dos grupos. A ambos grupos se les pidio realizar collages "tontos". También se les pidió a los niños que inventaran historias. Los proyectos menos creativos , según lo calificaron varios profesores, fueron hechos por aquellos estudiantes con quienes se había convenido recompensas. Amabile consideró que el trabajo "por encargo", en general, pudiera ser menos creativo que el trabajo que se hace por puro interés. Más adelante, Amabile pidió a 72 escritores creativ

Jugar

Explorar, experimentar, aceptar reglas (y cambiarlas), comprobar los límites... eso es el juego. Jugar implica, en primer lugar, tener la mente de un novato , de un principiante. Estar abierto , buscar patrones , probar cosas , equivocarse sin riesgo ... . Etimológiamente, la palabra proviene de un antiguo vocablo inglés (“plegian”), que significaba ejercitar, hacer ejercicio . Como verbo, “play” se define en términos de una actividad imaginativa - individual o grupal - que fomenta el descubrimiento y el juego. Como sustantivo, se refiere a una actividad involucrada en la diversión o la representación. . En ambos sentidos, está tremendamente conectada con la puesta en marcha de una mentalidad recreativa y lúdica. . Jugar, en su sentido más amplio, es la clave para potenciar nuestra capacidad para imaginar e inventar. Como consecuencia del juego, además, surge la diversión : un efecto positivo añadido que refuerza el proceso.

Mirada fresca

Para tener miradas frescas, muchas veces se precisan ojos frescos. Las miradas habituales muchas veces no atisban a comprender la naturaleza de un desafío. El enfoque de hacer, hacer y hacer , y de resolver problemas , nos lleva a abandonar - paulatina pero imperceptiblemente - la capacidad de examinar las cosas, de explorar situaciones, de comprender contextos. Con este sustrato, la creatividad se encuentra varada. Por eso, el denominado método del "chico de la pizza" suele aportar frescura y desatar nuevas perspectivas. La idea subyacente es que, en ocasiones, el chico que trae la pizza puede aportar perspectivas inimaginables a un problema o a un desafío. ¿Por qué? Porque no tiene miedo a formular preguntas , porque hace observaciones neutrales y porque su mirada es simplemente ingenua . . Tal vez por eso, muchos equipos que precisan de enfoques creativos invitan a personas que no son expertos en el asunto.